sábado, 22 de julio de 2017

Una visión sobre el sector de impulso

Tengo la fortuna de trabajar en El Rincón, una conocida cadena retail de alimentación de impulso y conveniencia. Su fundador, Antonio Flamenco, es un empresario hecho a sí mismo que con mucha dedicación y trabajo logró crear una gran empresa comenzando con un pequeño puesto en un mercado de barrio. El éxito inicial se debió a la popularización del autoservicio en un tipo de producto que anteriormente era adquirido en tiendas minoristas de forma tradicional y junto a otras familias de productos. La propuesta de ofrecer frutos secos con chucherías y hacerlo a granel era rompedora en los años ochenta. A lo largo de las siguientes décadas El Rincón ha sabido perfeccionar su oferta de valor incorporando los llamados productos de conveniencia, ha transformado su modelo de negocio mediante la integración vertical y ha sabido crear una fuerte imagen de marca mediante una estrategia de patrocinios, colaboraciones y eventos con infinidad de organizaciones a lo largo del tiempo. Este ejemplo, que conozco al detalle, me ofrece la posibilidad de soñar en voz alta e imaginarme cómo serán las empresas del sector de impulso en pocos años y cuáles son los retos a los que se deberán enfrentar.
http://www.fselrincon.com.

0. Cambio de Paradigma.
Hace años el productor o comercial decidía que tenía un producto bueno, lo fabricaba y lo vendía como quería. Se arriesgaba mucho. Solamente se podía triunfar si tenía buena intuición. En aquel tiempo se solía vender aquello que era parte de la cultura y costumbres. Posteriormente el marketing supuso el cambio: "satisfacer las necesidades de los consumidores", se introducía el concepto del estudio del mercado y del consumidor, ya no se vendía solo lo que el productor quería, cuanto mejor conocías a tu cliente mejor podrías venderle tus productos, eso sí, adaptados a sus necesidades. Ahora el paradigma del marketing se llama "experiencia cliente". Las organizaciones empresariales son tan complejas que ya no solo ofrecen productos y servicios adaptados al mercado, sino que el consumidor vive y siente múltiples experiencias en diversos puntos de contacto con la empresa, antes, durante y después del proceso de compra. Esta experiencia se debe monitorizar, analizar y mejorar, porque aquellas compañías del sector que se focalicen en la mejora de la experiencia cliente serán las que lideren posiciones de mercado en el futuro.

1. La transformación digital.
Si bien esta estrategia es transversal a todos los modelos de negocio, en el canal impulso cobra especial importancia porque avanzamos hacia un entorno de omnicanalidad. ¿Qué es esto? Significa que la experiencia cliente tiene que ser igual tanto en el canal online, en cualquier dispositivo, como en offline, en la tienda o en el espacio de consumo. El avance de la tecnología nos permite visionar una verdadera revolución.

Permíteme esta ensoñación: Estás viajando en tu coche en modo automático de Zaragoza a Sevilla. Son muchos kilómetros y estás entretenido viendo vídeos musicales. De repente te apetece una bebida y un aperitivo, así se lo dices verbalmente al ordenador de tu coche que te geoposiciona e informa de la tienda más cercana a tu recorrido, los productos disponibles y del precio. Casualmente está en tu misma ruta, llegas a la tienda, pones en modo pause el vídeo, ta bajas, entras, compras los productos, además un asistente te recomienda adquirir un Red Bull porque sabe que te gusta y te despejará cuando llegues a tu reunión de trabajo,  sales por la puerta en 2 min. El sistema de información te identificó, contabilizó tu compra y gestionó el pago de forma automática. No hay cajas. Te subes al coche y continúas viaje.
Los sistemas de información permitirán a las empresas predecir sus ventas y realizar ventas personalizadas. Los dispositivos se interconectarán e intercambiarán información gracias al internet de las cosas. La inteligencia artificial permitirá ofrecer conocimiento y experiencias optimizadas a cada consumidor.

2. Las nuevas tendencias.
Ha cambiado de forma significativa el consumidor y sus hábitos en el siglo XXI. Antes no se le daba tanta importancia a los ingredientes de un producto, su origen, su envoltorio, etc. Aquellas empresas del sector que más rápido adapten las tendencias a su modelo de negocio antes podrán evitar los riesgos de no adaptarse a estas.

Mi siguiente visión: Eres una persona que supera los 75 años con una relativa buena calidad de vida dado los avances médicos. Has ido a comprar tu barra de pan de cereales sin sal, sin glúten y sin azúcares a tu tienda. En el establecimiento tienes diferentes secciones, eco, deporte, salud, celebraciones, gourmet, vas a la de alimentos para vida saludable y dentro de esta te fijas en las golosinas funcionales. Son productos de impulso que contienen ingredientes naturales indicados para personas de tu edad, disponen de vitaminas, minerales y otros elementos beneficiosos para tu salud. Eliges la cantidad que quieres la metes en el envase que llevas para el efecto, ya que no hay ninguna bolsa de transporte en la tienda, la pesas y sales por la puerta junto con tu barra de pan. Una pantalla te saluda con tu nombre, te recuerda el día de la fiesta que ha organizado la empresa para los mayores y te desea un buen día. Fueron 5 min.

3. El  canal.
La alimentación de impulso se distribuye por diferentes canales y puntos de venta. En los grandes supermercados estos productos se encuentran tradicionalmente en la línea de cajas, aunque también se sitúan de forma estratégica en otras partes del establecimiento. Una de las estrategias comerciales de las cadenas especialistas es la capilaridad, es decir, disponer de una tienda cada pocos metros, El Rincón es buena muestra de eso. Y Zaragoza, una ciudad concepto para este sector. Si sumasemos todos los puntos de venta del Rincón más sus competidores y/o empresas complementarias nos sorpredenderíamos por la cantidad de metros comerciales dedicados por habitante. Ahora la clave es la facilidad de adquisición, la inmediatez del consumo y la asociación a la experiencia.

Ya como último sueño de este artículo: Estoy jugando en mi consola una partida multijugador junto a mis colegas de diferentes ciudades. En un momento recibo un mensaje de mi cadena de allimentos de impulso favorita, me sugiere que hagamos una apuesta, quién pierda la siguiente partida invita al resto y nos invitan a chocolatinas! Mis colegas aceptan. Pierdo y me toca pagar una Coca Colas Zero especiales para gamers y unas patatas. Hago el pedido directamente desde la consola, selecciono la opción multidestino. En unos minutos cada amigo y yo recibimos la comanda de un repartidor en bici. Por la compra me han sumado unos puntos a mi tarjeta cliente, ya me falta poco para conseguir el viaje de mis sueños!

Anteriormente la dificultad era entregar el pedido a cada cliente en el sitio y momento oportuno, pero eso gracias a las nuevas tecnologías (plataformas de última milla, drones, inteligencia artificial, BI predictivo...) y los cambios de hábitos cambiará la forma en la que deseamos recibir los alimentos para nuestros momentos de ocio. Nos enfrentamos a retos importantes en este sector comercial, hay mucha competencia, un target amplio y como veis por el artículo un cambio de paradigma que solo una cultura empresarial de innovación fuerte será capaz de superar.